domingo, 12 de junio de 2011

apariencia obtusa

Yo escucho la apariencia del ocaso
proclamando una búsqueda interior
dentro de tu ropa...

No temas... que encuentre algo secreto sobre tus pechos
y se muten mis dedos inaccesibles
ante el intento de lo palpable.
Surgen de tu confín esos cálidos contornos.
Lamiendo el efluvio de tus airados pezones.
Necesitamos esa perdición antes del primer sol.

Lo incógnito de la predicción y el deseo
nos delata;
es un acto obtuso que nos hace cosquillas
en la intimidad y se desliza. Al respirarte profundo.
Ven ámame sin dejar un lapso de hembra,
sin despertar el elixir de tu pena. Al amar eso secreto.
Para entregarnos expandidos en la boca de ambos. No temas al beso.
Ni temas al universo que nos reclama: Al unísono.
Yo escucho la apariencia del ocaso en un amanecer enredado
a tu lívido ( libido ) encanto.
Sin apariencias... Te amo.
Yo siento la apariencia del ocaso... en mi
y se aprisiona en ambos.

Miami, Florida.